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Programa:
Comercial
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Estado:
Construido, 2010
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Superficie:
4 000 m²
El proyecto de rediseño interior de Portones Shopping en Montevideo se enfoca en una renovación que busca mejorar la estética y funcionalidad del espacio, a la vez que fortalece la conexión del centro comercial con la comunidad.
La propuesta plantea una intervención cuidadosamente planificada que mejora la experiencia del usuario mediante la integración de elementos naturales, la optimización de la iluminación natural y la creación de espacios de descanso, todo ello manteniendo la funcionalidad esencial del centro comercial.
El diseño, que resultó ganador en un concurso por invitación, se centra en el espacio aéreo del mall, evitando alteraciones que interfieran con el funcionamiento diario del área comercial.
Una de las acciones más significativas es la restauración de los lucernarios a su estado original, eliminando decoraciones añadidas que obstruían su diseño inicial. Esta medida no solo mejora la iluminación natural del espacio, sino que también realza su estética original.
Además, se introducen «sillones jardinera» a lo largo del eje central del mall, creando zonas de estar que ofrecen intimidad y confort para los usuarios. Estos espacios complementan la experiencia, invitando al descanso y al disfrute dentro del entorno comercial.
En el área de los lucernarios, se han instalado plataformas de madera calada tipo celosías, suspendidas a diferentes alturas. Estas estructuras sostienen jardineras modulares prefabricadas, creando un sistema de jardines colgantes que aportan color, sombra y frescura, además de contribuir al control eficiente de la radiación solar.
La plaza de comidas ha sido objeto de una reconfiguración significativa. Se ha retirado la decoración sobrepuesta en el lucernario octogonal y se ha introducido un tambor de madera suspendido que redefine con claridad los límites del lucernario, otorgando una presencia visual coherente y atractiva. Este elemento, de bajo peso y montaje estratégico, es clave en la nueva configuración del espacio.
El diseño de la plaza de comidas se organiza alrededor de un plato de agua circular, que se convierte en el elemento central. Alrededor de este, se dispone el mobiliario necesario para acomodar a más de cien comensales. Un aro de jardineras en la planta baja, que replica el contorno del lucernario, sirve para delimitar y organizar el espacio, integrando un elemento natural y refrescante al ambiente.